En los últimos tiempos, existen expresiones que están siendo muy usadas, como ser «eso es fake» o «seguro es una fake new» y seguro más de una vez te habrás preguntado ¿Qué significa fake news? ¿Qué es este nuevo término que está siendo tan utilizado?.
Si hacemos la traducción literal de las palabras fake y news al español, sabremos que significan «noticias falsas«; ahora, si nos ponemos a pensar, día a día compartimos decenas de publicaciones en redes sociales, algunas son simples memes, algunas son recetas, otras son noticias o incluso consejos de salud, pero… ¿Cómo sabemos si proviene de una fuente fiable o si no se trata de una fake new?
En TodoCode te damos 5 pasos para que tengas en cuenta a la hora de compartir contenido y así puedas evitar la cadena de la DESINFORMACIÓN.
1- SIEMPRE DESCONFIAR
Parece un consejo sencillo, pero a veces lo que vemos como muy real en una red social, puede ser totalmente falso.
Tenemos que recordar el simple principio de que en una red social cualquier persona puede subir sus propias imágenes, su propio texto y hacerlo público para que los demás lo compartan (¡Incluso vos!).
Veamos un caso sencillo, una persona busca fotografías de alimentos saludables en internet, pone letras lindas encima, y escribe una nota en Facebook con el título ¡Descubren que las zanahorias causan enfermedades terminales!.
Lo primero que hacemos es compartir, porque nos parece algo «revolucionario» o «innovador», y no queremos que ningún familiar o amigo nuestro tenga una enfermedad por comer zanahorias ¿No?, pero lo que menos hicimos fue verificar si realmente tiene sentido que las zanahorias causen una enfermedad de ese estilo o de qué fuente proviene lo que estamos citando.
2- MIRAR LA FUENTE
Así como en el primer consejo tuvimos en cuenta el sentido de la publicación, es de suma importancia verificar la fuente desde la cual estamos compartiendo la misma.
Por ejemplo, no es lo mismo una publicación de un sitio de una entidad internacional como la OMS (Organización Mundial de la Salud), que una publicación que la hizo Juan Perez en Facebook o Instagram.
Supongamos el caso de las zanahorias nuevamente, si la publicación proviene de un sitio serio como el de la OMS, podemos ver que se trata de un sitio validado y certificado, por lo que podremos compartir tranquilamente la información sabiendo que es verdadera.
Ahora, supongamos que la publicación proviene de una página web como por ejemplo http://www.blogs.gratis.sinpagar.site.into.com/enterate-cancer-zanahoria/; en la dirección podemos ver que hay muchas posibilidades de que se trate de una publicación falsa por el simple hecho de tratarse de un dominio gratis como blogs.gratis.sinpagar.site.into. Por otro lado, el título después de la barra «/enterate-cancer-zanahoria/» puede darnos un indicio de que no es muy serio el artículo.
Otra forma de confirmar la fuente es verificar quien es el autor de la publicación que estamos queriendo compartir; en el caso de las zanahorias, podemos sospechar si la publicación no la hubiese hecho un nutricionista o médico especializado, sino por ejemplo, un abogado.
3- VERIFICAR LA FECHA DE LA PUBLICACIÓN
Muchas veces en Internet estamos ante información que ERA verdadera.
Hay un énfasis en la palabra ERA porque probablemente exista información que en 2013 era totalmente válida, nueva y real, pero en 2020 ya no lo sea.
Un ejemplo puede ser una noticia que indique el cambio de direcciones de una calle en una ciudad: si la publicación es del año 2013, por más que sea de una página reconocida y con un título atractivo como «Cambia el sentido de la calle San Martín en Oberá, Misiones» puede tratarse de información desactualizada.
Probablemente en ese entonces (2013) esta noticia era algo nuevo y efectivamente verdadero, pero en 2020 esa calle puede que mantenga su sentido y al republicar o compartir la noticia anterior, muchos conductores tengan problemas a la hora de circular por allí pensando que el sentido ha cambiado.
Recordemos que en Internet, difícilmente se borren publicaciones por más que pasen muchos años, por lo que compartiendo esto estamos contribuyendo a una fake new.
4- BUSCAR SI YA SE ESCRIBIÓ O SI HAY INFORMACIÓN AL RESPECTO
Si estamos ante la duda de compartir o no una publicación, tenemos que recordar que tenemos un viejo amigo llamado Google al que podemos acudir (además de otros buscadores como Yahoo, Bing, etc).
Supongamos que sospechamos ante la afirmación de que las zanahorias sean malas, podemos optar por buscar en Google algo tan simple como: ¿Las zanahorias causan enfermedades terminales? y Google al instante nos va a devolver varias páginas que contengan información al respecto…
Pero OJO!, dentro de esta información también puede estar esta misma página con «fake news» que estamos en dudas de compartir o alguna otra que se asemeje, por lo que SIEMPRE es conveniente volver al paso 2 y corroborar que la fuente sea oficial.
5- CONSULTAR CON UN EXPERTO SOBRE EL TEMA
Si después de estos pasos, seguimos en dudas o queremos saber si lo que leimos es verídico, podemos consultar con un especialista en el tema.
Si lo que queremos saber es si las zanahorias son dañinas, podemos consultar con un nutricionista, un ingeniero en alimentos o una persona que se dedique de forma profesional al estudio de los productos vegetales y sus propiedades, después de todo… Para eso existen personas capacitadas en distintos temas ¿No?.
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muy interesante :).